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Regalo un día de excursión enclases deportes extremos acuaticos Leon . ndo que sería más conveniente se quedó dormido. El mozo se fue al lado del 18; aceptaba ir al Club; el Embajador entregó el dinero y dio todos los datos. El desayuno los atrasó un poco; por eso Valdebenito y el viejito 17 se apresuraban camino a la Iglesia. Concluida la misa los dos compañeros de sala fueron a la cocina a comprar hallullas calientes. De vuelta Valdebenito pasó a ver al 16, a su pi
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Regalo un día de practicar deportes extremos de montaña Zaragoza . ay objeto para tu amor . por venenoso que pueda ser tu amor. Así es como apareces, Lina, en un mundo en el que todo entra y nada sale. Tú, Lina. Eso es lo que estoy mirando. A ti. Eso, Lina –consiguió decir por fin , es uno de los pavos más grandes que he visto en mi vida. Bien, pues no te quedes ahí mirándolo, idiota. ¡Ayúdame! Cogió el pavo y lo depositó sobre la encimera de la cocina notando
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