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Regalo un día de ofetas packs deporte de extremos terrestres Girona . laro que sí —replicó bruscamente—. ¿No se nota? —¿Me hace el favor? —pidió Garry—. ¿Quiere acompañarme hasta el lugar del camino donde descargamos el equipo? —¿A qué diablos viene eso? —inquirió el científico—. He de terminar mi trabajo. —Hágame caso; no le pido una tontería, sino algo importante —afirmó Garry—. Venga, por favor. —¡Bah!, ¡maldita sea su tontería! Ya voy, ya voy —dijo el científico
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